Aprovechando las características del lugar de vacaciones, durante el rodaje del domingo pasado estuve buscando una cuesta de 300m donde poder realizar la sesión del martes.
La sesión no salió muy bien y de los 3 bloques inicialmente planeados completé 2 y decidí no intentar el tercero. El cansancio acumulado de días anteriores sumado a la falta de costumbre de correr en cuestas convirtieron la sesión en un pequeño infierno.
En cada cuesta picaban las piernas así que una vez completado el segundo bloque decidí que el esfuerzo ya era suficiente. Me vino una frase a la cabeza: "Solo hay un entrenamiento malo... el que no se hace"
Así que finalmente fueron 2 bloques de 3 repeticiones de 300m cuesta arriba (10% pendiente) recuperando en la bajada.
En estos momentos ya se reafirmaba el pensamiento del domingo: Siete Aguas va a ser muy muy duro... "y lo sabes!"
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